Mucho Matador para poco Granate

Con un Mario Alberto Kempes a la altura de las circunstancias, luciendo mínimamente recuperado de malos usos anteriores, Talleres debutó con goleada en esta Superliga Argentina al ganarle por 4-2 a Lanús. El conjunto dirigido por Frank Darío Kudelka logró llevar a la red el buen juego mostrado a lo largo del encuentro y sumergió en muchas dudas en el Granate.

En un primer momento, el conjunto local complicó de sobremanera a Lanús gracias a una impecable presión alta, obligando a salidas forzadas y erráticas. Desenchufado Reynoso, fue Ramírez el encargado de armar el juego, mostrándose siempre como salida permanente. Talleres obligaba por las bandas: Menéndez y Palacios hacían de las suyas arrancando en tres cuartos y al lado de la raya. Un desborde y posterior remate de “Joni” fue la más clara para el Matador en el primer tiempo.

Lanús dependía mucho de Martínez, que no tenía socios para armar juego y aparecía demasiado retrasado para poder tener contacto con la pelota. Aun así, cuando tuvo la oportunidad estrelló un remate en el palo izquierdo de Herrera. Acosta y Silva estuvieron más preocupados por las subidas de Godoy y Olaza que en acompañar a Sand, aunque el segundo aprovechó una pelota perdida en el medio para romper el travesaño. El balón era de Talleres pero las más claras, de Lanús.

Nada cambió en el segundo tiempo. Porque el equipo dirigido por Almirón continuó estando errático en la salida y sin tirarla lejos, mientras que el Matador siguió inquietando mediante Menéndez y monopolizando la pelota. El claro ejemplo de la pasividad de Lanús a la hora de defender fue el segundo gol de Talleres: luego de una muy buena jugada asociada, el lateral Godoy penetró la zaga central, remató al palo y Arias empujó al gol.

El encuentro entró en un golpe a golpe mutuo. Centro del recientemente ingresado Rojas y gran cabezazo de Martínez, marcando el empate parcial y certificando su importancia para este Lanús. Pero las pardas no duraron mucho: una falta de Braghieri a Palacios fuera del área que el árbitro Vigliano vio dentro y, apoyado por sus asistentes, marcó el polémico penal. A pesar del reclamo de todo Lanús, el tucumano fue el encargado de anotar el justo 2-1.

El Granate fue a buscar el empate. Apareció Acosta, surgieron socios para Martínez y el balón pasó a ser propiedad suya. Talleres se paró de contra y dejó que el error llegue sólo. Y esto fue una nefasta combinación para Lanús: mal pase atrás de Pasquini, Monetti evitó el gol en contra pero le dejó servido el segundo de su cuenta a Palacios. Contra letal de Menéndez, que gambeteó a varios y anotó. Otro contra ataque y Marcelo Torres hizo su debut en las redes. Poco sirvió el descuento de Denis. Talleres ganó, goleó y gustó y arrancó de la mejor manera la Superliga.

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